Una reflexión sobre cómo los cinco pilares del Islam nos ayudan a profundizar en la humildad, un componente necesario de la creencia del Musulmán.
Cuando comencé a practicar el Islam de manera más adecuada, me di cuenta de que la arrogancia era una trampa peligrosa. Me di cuenta de esto en primer lugar debido a la observación. No es agradable ver a alguien que es religioso y luego darse cuenta de que menosprecia a los demás por eso.
También me hizo fijarme en mi mismo, detenidamente, y pensar si estaba en el mismo barco. Y esto fue un poco aterrador, porque descubrí que no era fácil de evitar. Es difícil tratar de evaluarte a ti mismo y encontrar faltas. Una parte de mí, tal vez mi nafs, decía: “¡No hay necesidad! ¡Estás bien!”. Eso también podría haber sido los susurros de Satanás.
Entonces, ¿por qué continué? ¿Por qué molestarme en luchar contra estos atractivos pensamientos que me decían que siguiera como estaba, en lugar de buscar si había arrogancia en mi? Me encontré con este Hadiz que me convenció de la gravedad de esta falta:
El Profeta Muhammad (la paz sea con él) dijo:
Nadie que tenga el peso de una semilla de arrogancia en su corazón entrará al Paraíso.
Alguien dijo:
¿Y si a una persona le gusta llevar ropas y zapatos hermosos?.
El Profeta dijo:
En verdad, Allah es Bello y ama la belleza. La arrogancia significa rechazar la verdad y menospreciar a las personas.
Sahih Muslim
Entonces, me di cuenta de que esto no era algo sobre lo que bromear. Ser humilde es básicamente un requisito de nuestro Din (religión). Y qué hermosa religión es esta… Saca lo mejor de nosotros, si se lo permitimos.
Para mí, todo se reduce a pensar de dónde obtenemos las cosas buenas que tenemos, ya sean cosas materiales o una creencia fuerte. Todas estas son bendiciones de Allah Todopoderoso. Si así lo decide, podría quitárnoslas. El hecho de que se nos permita conservar estas bendiciones dice mucho sobre la misericordia de nuestro Señor, y nada sobre nuestro estatus en comparación con los demás. Allah es quien da y guía.
Adoración y Humildad
Los cinco pilares del Islam enfatizan la importancia de la humildad. Echemos un vistazo más de cerca a cada uno de ellos para comprender mejor lo que esto significa.
- Shahada
El primer pilar del Islam es la Shahadah (testimonio de fe). Declaramos que no adoramos y obedecemos a nadie más que a Allah, y que aceptamos que el Profeta Muhammad es Su siervo y mensajero final.
Para mí, esta es la mayor forma de humildad. Requiere que una persona deje de lado cualquier arrogancia que pueda tener y sea humilde ante Dios. Es renunciar a su voluntad para hacer lo que les plazca y vivir solo según los mandatos de Allah.
- Oración
El segundo pilar es el Salah (las 5 oraciones diarias). El Salah es esencial para desarrollar la humildad porque, una vez más, nos sometemos a Allah cinco veces al día, sin importar lo que esté sucediendo. Todos los musulmanes del mundo deben hacer la oración cinco veces al día, y rezan de la misma manera sean ricos o pobres. Nos inclinamos y nos postramos ante Allah para mostrar que frente a Él no somos nada.
- Zakah
El tercer pilar es el Zakah (limosna obligatoria). Se exige el Zakah a todos los musulmanes que tienen un mínimo de riqueza estipulado acumulada. Se da a los pobres y no se considera caridad, sino un derecho de los pobres sobre ellos.
Este es otro recordatorio de que lo que tenemos no es realmente nuestro, es una bendición de Allah, que debe usarse de la manera que Él quiere. Él nos dio nuestra riqueza y decretó que cada musulmán elegible debe dar una parte de ella a aquellos que la necesitan. Por supuesto, dar sadaqah (caridad voluntaria) es muy importante en el Islam, pero el Zakat es un requisito básico.
- Ayuno
El cuarto pilar del Islam es el ayuno en Ramadán. Los musulmanes de todo el mundo hacen lo que muchos pensarían que es imposible: ayunan desde el amanecer hasta el atardecer, sin comida ni agua desde la salida hasta la puesta de sol. Solo unos pocos grupos de personas están excluidas de esta obligación debido a circunstancias fuera de su control, como aquellos que están enfermos, menstruando o viajando.
El propósito del ayuno en Ramadán es a ayudarnos a obtener más conciencia de Dios y autocontrol, pero no hay duda de que también es un ejercicio de humildad. Nos ayuda a empatizar con aquellos que no comen ni beben durante gran parte del día, no como un deber religioso, sino porque simplemente no tienen otra opción.
- Hayy
Por último, el quinto pilar es el Hayy (peregrinación a La Meca). El Hayy es un fenómeno hermoso en el que personas de todos los colores y orígenes se reúnen en el lugar más sagrado de la Tierra para no hacer nada más que adorar y someterse a Allah. Visten lo mismo, un atuendo minimalista que básicamente es solo un par de piezas de tela blanca (para hombres) o un vestido simple (para mujeres). Todos siguen los mismos rituales y se cansan en un esfuerzo por obedecer el mandato de Allah: hacer el Hayy una vez durante su vida (si pueden).
En mi opinión, realizar el Hayy es el pináculo de la humildad y no hay lugar para la arrogancia en ello.
Estas son solo algunas de las formas en que el Islam nos ayuda a ser más humildes en nuestra vida cotidiana. Si alguna vez nos viene a la mente el pensamiento “Soy mejor que fulano de tal”, podemos regresar a los cinco pilares. Lo más importante es que debemos recordar que Allah es quien nos provee de todo y Él es verdaderamente el Más Grande.