El Ramadán es un momento especial para los musulmanes de todo el mundo, hay una alegría que viene de observar -como comunidad entera- los beneficios y la belleza de este mes sagrado. Para aquellos que están enfermos o ancianos, esto puede hacer que se sientan solos y no alegres.
Conocer todos los beneficios que vienen con ayunar y alabar a Dios puede hacer que alguien a quien no se le permita ayunar se sienta excluido. Pueden sentir que no tienen la misma oportunidad de arrepentirse y rogar por la misericordia y la recompensa de Dios, y que son menos que sus hermanos y hermanas que pueden ayunar.
Lo que no ven es que Dios les ha dado la misma oportunidad de recompensa y misericordia, de una manera “más fácil”. Hay alternativas al ayuno que se pueden hacer para que experimenten la belleza y la recompensa que es el Ramadán.
Primero, veamos cuál es el propósito del ayuno. El Corán dice:
¡Oh, creyentes! Se les prescribe el ayuno al igual que fue prescrito a quienes los precedieron, para que alcancen la piedad.
Al-Baqarah 2:183
¿Quién puede no ayunar?
Abstenerse de alimentos y agua durante un período prolongado de tiempo no es una opción viable para muchos. Debido a esto, Dios ha otorgado misericordia durante este tiempo a nuestros hermanos y hermanas. Los que no deben o no pueden ayunar son los siguientes:
- Aquellos que están enfermos (si se trata de una enfermedad temporal, el ayuno debe recuperarse más adelante)
- Los ancianos.
- Quienes están de viaje (un mínimo de 48 millas u 80 kilómetros)
- Niños
- Mujeres que menstrúan o sangran postnatal (deben recuperar el ayuno cuando pueden)
Si fuese el caso de que ponga su vida y su salud en grave riesgo de ayunar durante aproximadamente 15 horas al día, es aceptable no ayunar.
Alternativas al ayuno
Debido a la falta de espíritu que uno puede sentir en este momento, hay muchas otras formas en las que aún puede mantenerse firme en su fe a pesar de que no puede unirse al ayuno.
Pagar Fidyah es lo que se prescribe a los musulmanes que no pueden ayunar. Para hacer esto, uno puede preparar un día de comidas para las personas sin hogar o las personas necesitadas. O en lugar de eso, pueden pagar financieramente la equivalencia de estas comidas a alguien que lo necesite. Pagar Fidyah debe suceder por cada día que no se ayuna.