Allah nos dice en Su Sagrado Corán que Su último Profeta Muhammad, que la paz sea sobre él, es nuestro modelo a seguir y el mejor ejemplo, que debemos tratar de imitarle lo mejor que podamos. Uno de los aspectos en los que tenemos que imitarle es a la hora de dar caridad.
Podemos encontrar orientación y enseñanzas para básicamente todos los asuntos de nuestras vidas en las palabras y acciones de nuestro amado Profeta Muhammad.
Fue el mejor ser humano que Allah ha creado y nadie ha superado, ni superará sus modales y su hermoso comportamiento. Le daba a la gente a pesar de que él mismo tenía menos, y su familia se quedó sin nada cuando regresó a Allah. ¿Qué podemos aprender de él?
Da en los buenos tiempos
Nuestro amado Profeta Muhammad dio a la gente en caridad mientras estaba sano y vivo. Dijo que un dirham (moneda de plata) de caridad dado cuando uno está sano cuenta más y es mejor a los ojos de Allah que cien dirham dados en caridad por una persona muerta.
Muchas personas comienzan a dar caridad abundante una vez que están enfermas o a punto de morir. Sin embargo, el Profeta Muhammad (que Allah le conceda paz y bendiciones) nos enseñó que es mejor dar cuando estamos sanos y vivos.
El Profeta Muhammad daba cuando tenía algo que dar e incluso daba en caridad cuando no tenía nada que dar.
Una vez, un hombre se acercó al Profeta Muhammad y le pidió caridad. El Profeta no tenía nada que darle, pero el hombre siguió insistiendo. Viendo esto le dijo al hombre que fuera a una tienda y comprara lo que necesitara y le dijera al dueño de la tienda que la deuda era del Profeta.
¡Qué increíble! No pensó en su propia deuda o en llenar su propio estómago, sino que pensó una forma de ayudar a este hombre que le pedía caridad.
¿Qué podemos aprender de ese incidente?
Incluso si tenemos poco, debemos tratar de dar. No esperes a que vengan tiempos mejores. Si estamos vivos y sanos, es el mejor momento para dar en caridad.
¿Cómo debemos dar en caridad?
Hay diferentes dichos del Profeta Muhammad (que Allah derrame sus bendiciones sobre él) que nos dicen que cuando alguien venga y nos pida caridad, debemos dársela.
Debemos intentar dar a esa persona aunque sea algo que parezca de poco valor.
Y es muy importante que demos nuestra caridad de la mejor manera. En realidad, debemos tratar de entender que Allah nos ha enviado a esa persona. Y necesitamos entender que la persona que nos pide caridad tiene derecho a parte de nuestra riqueza.
Sin embargo, no es solo la persona que nos pide caridad la que tiene derecho sobre parte de nuestra riqueza, sino también la persona que no nos la pide (Corán 51:19 y Corán 70:25).
Tenemos que ir a buscar a los que necesitan nuestra caridad y ayuda. Tenemos que dar de la manera más bonita y sin avergonzarlos ni menospreciarlos.
Dar a los que están cerca de ti
Al dar caridad, muchos nos olvidamos de las personas cercanas a nosotros. Sin embargo, nuestros familiares, vecinos, amigos o compañeros necesitados son los que deben tener prioridad.
El Profeta Muhammad dijo que cuando damos a los pobres, sólo damos caridad; pero cuando damos a los miembros de nuestra familia, damos caridad y también mantenemos los lazos familiares.
Mantener los lazos familiares es muy importante en el Islam. Debemos ser amables y amistosos con nuestros parientes cercanos y lejanos.
Por ejemplo, si nuestro tío necesita ayuda para pagar la escuela y la comida de sus hijos, debemos darle a él primero porque pertenece a nuestra familia. Si nuestros padres necesitan asistencia financiera, primero debemos tratar de aliviar su carga antes de enviar dinero a una ONG.
Dar caridad extiende la felicidad y mantiene alejadas las calamidades
Dar caridad con la intención de ayudar a otras personas, o porque queremos aliviar una pequeña parte de su pesada carga, o porque queremos hacerlos felices en tiempos difíciles, es inmensamente gratificante.
Lo hacemos por aquellos que reciben nuestra caridad tanto como lo hacemos por nosotros mismos. Dar nos hace sentir bien. Muchas veces que nos sintamos un poco tristes o incluso deprimidos, debemos tratar de hacer feliz a alguien. Esto seguramente nos animará, inshaAllah.
Dar caridad también aleja de nosotros las calamidades. Tal vez porque una persona da en caridad de forma regular, Allah alejará a los ladrones de su casa o lo mantendrá con buena salud.
Tal vez porque otra persona alimenta regularmente a los pobres, Allah mantendrá alejada la discordia de su familia.
Dar a personas que tienen menos que nosotros nunca disminuirá nuestra riqueza y nuestra provisión. Al contrario, solo traerá bienes y bendiciones en nuestra vida y en la vida de nuestra familia.
Entonces, ¡tratemos de dar más!
El Profeta Muhammad, que la paz sea con él, mencionó muchas veces la virtud de dar caridad en relación con la liberación del fuego del infierno y el castigo de Allah por nuestras faltas.
Dar caridad puede borrar nuestras malas acciones y puede protegernos de una mala muerte.
Traducido del inglés del archivo de About Islam: Giving Charity – Lessons From Prophet Muhammad